L
La madrugada ha llegado
y yo solo con mi soledad
recostado en el viejo sillón
y los recuerdos que vienen
y van por mi mente de nuestro amor.
Me embrujo tus ojos verdes como el mar.
Tus manos blancas y pequeñas que mis
manos acariciaban.
y tu figura de ángel.
Más todo fue inútil
me enamoré como un loco.
Pero tu solo te rías de mí.
Despúes de tantos ¡te quiero!
pronunciados por tus labios color carmín.
Una tarde te alejaste sin despedirte
dejándome solo sumergido en éste dolor
saviendo que nunca regresarás.
Más no importa,seguiré amándote en ésta soledad.
Guardando aquellos días como un tesoro
escondido dentro de mi corazón.
Y no importa si no regresas.
Te ame,te amo y seguré amándote
hasta el fin de mis días.
Porque no abrá nadie que logre que te olvide.
Dicen que de amor no se muere
pero te confieso que comence
a morir desde tu partida