María por la gran ciudad caminando va.
Mientras recuerda,aquellos días llenos de amor,
junto a su querido Juan.
Más luego, ese adios tan repentino.
Que no save porqué fue.
Se pregunta una y otra vez,si en busca de otro amor
se ha ido.
Sí tal vez la rutina diaria fue quien los alejo,
apagando tanto amor.
Más sola quedó con sus recuerdos.
Y en el corazón esa herida que jamás curó.
Suspira profundamente,mientras con pequeño murmullo
dice.
-¡Hay amor! cuanto te extraño.
-La ciudad parece enorme y sus edificios gigantes que acechan.
La casa está vaciasi tu no estás.
Los pájaros sus trinares no dejan escuchar.
Y las rosas del jardín,se niegan a florecer.
¿Regresa amor! me siento tan sola,si tú no estás..
¡Hay amor!, regresa y volvamos nuevamente
a vivir nuestro amor.
Regresa que aún,esperandote estoy.