Los dos changos al llegar al rancho , entran entusiasmados, casi los dos a la ves saludan a su mamá´y al tata
-hola mamá , hola tata.
Al cual respoden
-hola changos ya han venido del campo de don Rosendo,
-si mamá y sabes una cosa, nos conto Don Rosendo que la semana que viene, haí no más al ladito del arroyo
una escuelita van a poner.
-Tata-¿una escuelita? ¿que és eso?
-¿que estas diciendo mi hijo?
-hija-que van a poner una escuelita,
que una maestrita va a venir, dicen que va enseñar a leer y escribir.
-el tata medio enojado responde
-no me vengan con cosas raras,
que solo la tierra tienen que trabajar
los hijos como suplicando, pero tata nosotros queremos aprender más.
El tata con vos dura les responde bueno ahora a dormir, dónde se ha visto, ir a una escuelita para aprender.
Tomo el gaucho su guitarra sentandoce frente al fogon,
miró al cielo y en voz alta dijo
pero Tatia Dios, que han dicho los changos que quieren ir a la escuela que una maestrita les va enseñar.
¿que dirá LA PACHA MAMA ? cuando no sienta sus manos hundirse .
Si mira mis manos cubiertas de callos de tanto darles a los surcos, levantar la cocecha y cortar la leñas..
--Pero tata si yo no digo, que voy a dejar el campo, solo quiero aprender a leer y escribir.
-Ésta vien changos iran, pero tienen que prometerme que jamas olvidaran a sus raices.
Que aunque llegen hacer tal ves una gran doctora o un profesor, recordaran siempre este cielo que un día los cobijo, este poncho que en noches de frios los abrigoy esta Cruz DEL Del Sur que siempre los guió.
Acercandoce los changos dijieron te lo prometemos TATA.
-el tata habrió sus brazos para abrasarlos diciendo tengan los dos mi bendición.